Encabezados por el coordinador de Vida Silvestre del SAG de la Región de O’Higgins, Diego Ramírez, un grupo de herpetólogos de reconocida trayectoria académica nacional realizó una prospección de reptiles altoandinos en zonas cordilleranas de la región.
El grupo de herpetólogos estuvo compuesto por Jaime Troncoso-Palacios, investigador de la Universidad de Chile; Diego Demangel, consultor y redactor de libros sobre la materia; y Juan Pablo Gabella, de la consultora ambiental Fauna Chile.
Cabe destacar que la herpetología es la rama de la zoología que estudia a los anfibios y los reptiles, cuyo análisis es fundamental para analizar el estado de conservación o perturbaciones de los ecosistemas en general, ya que ambas especies son muy sensibles a los cambios en su entorno.
El objetivo de la prospección fue determinar la presencia de especies de reptiles altoandinos, dos mil a tres mil metros sobre el nivel del mar, en la zona central de la cordillera de la región, corroborar la determinación de especies y obtener material fotográfico para literatura a publicarse sobre los reptiles de Chile.
Hallazgos
Durante la actividad se logró identificar a dos especies de lagartos altoandinos de escasa presencia como lo son el Lagarto de Ubagsh, Liolaemus ubagshi, y el Lagarto de Belli, Liolaemus Bellii. En la jornada también fue prospectada la presencia de la lagartija negroverdosa, Liolaemus nigroviridis, de presencia más común en el área.
“Las especies de lagartos encontradas son de conducta reproductiva vivípara, es decir que paren crías vivas, a diferencia de la mayoría de los reptiles ovíparos del planeta, lo que es una estrategia eficiente de los lagartos altoandinos chilenos, como mecanismo adaptativo para el desarrollo de la especie en las bajas temperaturas de Los Andes”, sostuvo Diego Ramírez, Coordinador de Vida Silvestre del SAG.
“Para el caso del Lagarto de Ubagsh, Liolaemus ubagshi, esta especie cuenta con un microendemismo solo en la zona prospectada, cuya abundancia relativa y frecuencia es baja, con competitividad territorial con el Lagarto de Belli, Liolaemus Bellii. Por esto, el Lagarto de Ubagsh podría encontrarse en una categoría de conservación amenazada, ante lo cual se deberá plantear un plan de conservación en conjunto con los propietarios del terreno”, afirmó Ramírez.
Durante la observación general, se encontró un total de 18 especies diferentes, con un número total de 63 ejemplares aproximadamente, sin considerar los cientos de larvas de Rhinella sp. halladas. De esta forma se distinguieron cuatro especies de anfibios y reptiles, dos especies de mamíferos y doce especies de aves. Del total de especies encontradas, cinco son endémicas, es decir, solo habitan en el país. Finalmente, un tercio de las especies encontradas están en categoría de conservación amenazadas, en Peligro o Vulnerables, según la legislación vigente, lo que proyecta a la zona cordillerana central como un territorio esencial para la protección de la fauna nativa chilena.