El anuncio de la conformación de una mesa de trabajo que buscará abordar la interacción del puma con las comunidades cordilleranas en la región de O’Higgins, y el conflicto que se genera entre las medidas de protección y las potenciales pérdidas de pequeños ganaderos que realizan pastoreo en la zona andina, fue uno de los puntos destacados del Seminario “El Puma en O’Higgins, mitos y realidades”, donde participaron más de 80 personas, y que fue organizado por la Unidad de Vida Silvestre del SAG y la Mesa de trabajo público-privada sobre la Fauna Cordillerana de la Región de O’Higgins.
La jornada comenzó con la exposición de Pedro Ávila, quien en representación de los pequeños ganaderos de Coya y Machalí, expuso la problemática situación que viven por las pérdidas de ganado, presumiblemente atribuibles a ataques de carnívoros como el puma. “Una de las cosas principales es el asunto de nuestro ganado y el puma. Nosotros somos más de 80 socios y varios socios han perdido bastante ganado equino. La idea es llegar a un acuerdo de cómo se puede disminuir estas pérdidas que hay”.
Durante la jornada, expusieron importantes investigadores de fauna nacional, como Gonzalo González, Eduardo Pavez, Nicolás Guarda, y Cristián Saucedo, además, de profesionales ligados estrechamente a la actividad, como Gabriela López y Andrés Albert, quienes expusieron las acciones de organismos como el SAG y CONAF para enfrentar la interacción entre ganadería y carnívoros silvestres.
Zandra Monreal, Gerente de Medioambiente de Pacific Hydro, indicó que “nosotros estamos participando en la mesa público privada que estableció el SAG, y a la vez por un compromiso ambiental que tenemos por una resolución de calificación ambiental para aprobar nuestros proyectos en la cuenca, nos comprometimos a hacer un estudio sobre pumas, que se ha desarrollado durante cuatro años en la cuenca del Cachapoal, y quisimos entregar todo este producto del estudio al SAG, que es el organismo gubernamental que está a cargo de la protección del puma y que, además, tiene una relación súper importante con los ganaderos. La idea es poder conducir esto a las personas que puedan manejarlo mejor y puedan darle más utilidad a esta información que se ha generado de manera que pueda aportar a tener una mejor relación entre los arrieros y las personas que están a cargo de la conservación del puma”.
Rodrigo Sotomayor, director regional del SAG, indicó que a través de este seminario “se busca generar un poco más de conciencia, pero particularmente, lo que hoy se busca es una interacción donde los ganaderos puedan recibir conocimientos más actualizados basados en ciencia, en el análisis de la población –de pumas- que está presente en la alta cordillera, para demostrar con números cual es el impacto, distribución y abundancia del puma”.
El directivo agregó que “esta especie está protegida por Ley, es el carnívoro silvestre más importante, controlador natural de diversas otras especies, y está dentro del ámbito que nos compete. Por eso, mediante la ciencia, mediante la investigación, tratamos de determinar cuál es el nivel preciso de su presencia y ese antecedente nos debe permitir generar un mejor diálogo con los ganaderos y desmitificar una serie de cosas que están instaladas, con ciencia vamos a generar un intercambio, porque como SAG también estamos del lado de los pequeños ganaderos, porque es un ámbito productivo que nos interesa mucho”.
En el seminario se mostraron, además, los resultados más recientes de estudios poblacionales y ecológicos de este gran felino que habita la cordillera de Los Andes. Además, se conocieron experiencias de otras regiones, como Aysén, en la que la relación entre actividades productivas y la presencia del puma es siempre materia de análisis.
“En un breve tiempo, daremos el siguiente paso de sentarnos en esta mesa de trabajo, las instituciones del estado, las empresas, los pequeños ganaderos de la cordillera y los representantes de la comunidad y opinión pública, con el compromiso y la convicción de generar una visión común en la protección de esta especie, dentro de un marco sustentable que permita convivir con la actividad ganadera, con herramientas que aporten todos los actores y generando soluciones en consenso”, señalo Diego Ramirez, Coordinador de la unidad de Vida Silvestre del SAG O’Higgins.