Apenas abrieron sus puertas diversos locales comerciales de venta de carne ubicados en las inmediaciones del rodoviario de la capital maulina y en el sector Oriente de Talca, fueron fiscalizados por la Comisión Regional de Abigeato revisando de esta forma toda su documentación principalmente procedencia de los animales, lugares de acopio de la carne y las condiciones sanitarias de vitrinas y el recinto en general.
Se trata de un operativo de fiscalización que la Comisión está efectuando en diversas comunas del Maule liderados por la Fiscalía y donde participa el Servicio Agrícola y Ganadero SAG, la Seremi de Salud, el Servicio de Impuestos Internos, Carabineros y la Policía de Investigaciones. De esta forma cada una de las instituciones se aboca a fiscalizar aquello que es de su competencia con el sólo objetivo de brindar tranquilidad a la comunidad en las compras que haga durante estas fiestas de fin de año.
“Se está haciendo un trabajo en la treinta comunas de la región y hay fiscalizaciones en sectores rurales al transporte de animales y ganado que es donde nacen en definitiva las carnes que son distribuidas a la ciudad verificando que todo esté en regla. Nosotros no andamos buscando gente para llevar detenida o cursar infracciones, lo que a nosotros no interesa es salir de una carnicería y que esté todo en regla para que la comunidad esté tranquila y los dueños de carnicerías o administradores estén tranquilos en torno a que han pasado las pruebas desde todo punto de vista”, afirmó el fiscal Paulo Rodríguez, coordinador regional de la Comisión de Abigeato.
Por su parte el director regional del SAG, Cristian Lara, señaló que “estamos interesados en fiscalizar la ley de carnes y principalmente lo que implica el tema de trazabilidad. En las carnicerías, principalmente, se exige que los cortes de vacuno correspondan a los que salen de los mataderos que fueron inspeccionados por equipos del SAG y que están en condiciones para consumo y, además, que el consumidor esté seguro de que la carne que está comprando corresponde a la categoría que él está adquiriendo. Para eso se exige que las carnicerías cuenten con los letreros que indique la categoría que están vendiendo”.
El control dio cuenta que se ha mejorado la norma sanitaria en la venta de carne sobre todo de aquellas carnicería que en fiscalizaciones anteriores no han superado la prueba de calidad siendo objeto de decomisos y multas. Sólo en una de los lugares inspeccionados el Servicio de Impuestos Internos detectó irregularidades siendo objeto de altas multas.
La comisión de abigeato aseguró “tolerancia cero” para estos días de fin de año donde el consumo de carne aumenta de manera considerable.