- Se trata del primer acuerdo bilateral de reconocimiento que el bloque europeo suscribirá con un país.
Un importante anuncio realizó ayer la Unión Europea: su consejo acordó firmar un acuerdo para el comercio de productos orgánicos con Chile, lo que en la práctica implica el reconocimiento de equivalencia de sus respectivas normas y sistema de control en este tipo de producción.
Este importante paso permitirá que, en breve tiempo, los alimentos ecológicos que se producen en Chile sean comercializados sin restricciones en todos los países de la UE y viceversa, lo que abre enormes posibilidades de negocio a quienes en nuestro país han optado por producir al amparo del Sistema Nacional de Certificación de Productos Orgánicos Agrícolas del Servicio Agrícola y Ganadero.
El Ministro de Agricultura, Carlos Furche, se mostró muy satisfecho con la noticia, señalando que “hemos dado un paso relevante que abre múltiples espacios a los productores orgánicos chilenos, ya que nuestro país goza de un gran potencial para crear nuevas oportunidades para los agricultores y las empresas de este rubro".
Por su parte, el Director Nacional del SAG, Ángel Sartori, destacó “que este es el primer acuerdo de nueva generación de la Unión Europea – es decir, con equivalencia y reciprocidad, lo que da cuenta del trabajo serio y riguroso que cumple el SAG respecto del Sistema Nacional de Certificación, en garantizar que la producción orgánica de nuestro país cumpla con la normativa”.
A través de este acuerdo la Unión Europea reconocerá como equivalentes productos vegetales no elaborados, miel, productos agrícolas transformados para uso como alimento (incluido el vino), material de propagación vegetativa y semillas para el cultivo que se exporten desde Chile.
Mientras que, para la importación hacia nuestro país desde la UE, se aplicará a productos vegetales no transformados, animales vivos o productos animales (no miel), productos de la acuicultura y algas marinas, productos agrícolas transformados para uso como alimento (incluido el vino), productos elaborados agrícolas destinados a la alimentación animal, material de propagación vegetativa y semillas para el cultivo.
El acuerdo ahora debe ser corroborado por el Parlamento Europeo y por el Congreso Nacional de Chile, y entrará en vigencia tres meses después de la notificación final de la conclusión de los procedimientos a las partes involucradas.