El gorgojo de la corteza del pino puede provocar la muerte de ramas, brotes en plantas o de árboles completos de distintas edades.
El síntoma más evidente de su ataque corresponde a una clorosis del follaje del vegetal provocada por el anillamiento de la zona subcortical, posteriormente el follaje se vuelve de color pardo. Al observarse con mayor detalle sobre la corteza de plantas o árboles infestados, es posible observar la presencia de pequeñas perforaciones circulares a través de las cuales emergieron los adultos, y en su interior galerías de larvas y cámaras pupales bajo la corteza. Las plantas o árboles atacados, habitualmente presentan abundantes galerías de alimentación larvaria bajo la corteza, la cual se desprende con mucha facilidad con la ayuda de un cuchillo o cortaplumas.
Los adultos realizan numerosas perforaciones pequeñas para alimentarse en la corteza de ramas delgadas o también en ramas más gruesas para depositar sus huevos.
El adulto del gorgojo de la corteza del pino mide 5 a 11 mm de largo, de forma general ovalada, siendo de color café con una serie manchas amarillentas y blanquecinas en su dorso que le permiten camuflarse con la corteza de los pinos. Al emerger el adulto desde la zona subcortical donde se desarrollan sus estados inmaduros, realiza una perforación a través de la corteza de sección circular.
Las perforaciones de alimentación miden poco más de 0,5 mm de diámetro y son realizadas en la corteza de ramas delgadas, brotes de árboles adultos y también en el tallo de plantas juveniles.
Las larvas son blancas, curvadas, de menos de 1 cm de largo, se desarrollan bajo la corteza de especies hospedantes, donde construyen múltiples galerías subcorticales. En estos mismos lugares se pueden observar cámaras pupales, las que son características por su forma ovalada y cubiertas de viruta filamentosa y blanquecina en cuyo interior se encuentra la pupa.